Niegan que haya maíz transgénico en Chiapas
En Chiapas no está autorizada la siembra de maíz transgénico, recalcó el titular del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Enrique Sánchez Cruz, en su visita de trabajo a la entidad.
“En Chiapas no hay sembrado maíz transgénico, no hay ninguna autorización, absolutamente ninguna, de hecho las autorizaciones que ha habido a nivel experimental pero en estados del norte, no en Chiapas, ni en el Estado de México, en ningún estado, sólo en la parte del norte y a nivel experimental.”
Investigadores explicaron que la siembra de transgénicos viola el derecho a la alimentación de los pueblos, y destacaron que esas siembras colidan con tres Áreas Naturales Protegidas (ANP) federales: El Triunfo, en la Sierra Madre; La Encrucijada, en la Costa, y la Frailesca, la más afectada, ya que explican que es a donde llegarían los fluidos tóxicos de esas plantaciones.
En su oportunidad, Belisario Domínguez Méndez, director de productividad de la Sagarpa en Chiapas, destacó que “en la legislatura pasada se nombró que es una petición de productores a nivel de la república de que se autorizarán parcelas demostrativas pero únicamente en el norte de la república, Chiapas es ajeno porque tenemos semillas criollas, semillas nativas de maíz, por eso en Chiapas no hay siembra de maíz transgénico”.
Según datos obtenidos a través de la Ley Federal de Acceso a la Información Pública, Monsanto ha sembrado en Chiapas 18 mil 911 hectáreas de soya transgénica, aunque la Sagarpa niega que se haya autorizado algún permiso, según Sánchez Cruz.
“Se reitera, no hay maíz transgénico, no hay un solo, y si ustedes tuvieran un reporte sería muy útil compartirlo, con nosotros porque está prohibido y habría que compartir sanciones porque habría sido sin permisos y si hay sería clandestina, y soya en el estado tampoco hay soya transgénica, yo ya tomé nota del reporte para investigarlo.”
En Chiapas, la siembra de soya transgénica con Monsanto significaría daños a cerca de 25 mil familias de apicultores campesinos.
Además de los daños ambientales, existen fuertes daños a la salud de la población, como niños nacidos con malformaciones, enfermedades de leucemia por estar en contacto con agrotóxicos.